
Luego ya no supe como había llegado a este lugar:
Imagínense la más pura
nada codificada en binario. Y yo en medio.
Compartiendo cuarto con un conejo
Un gato
Botellas de agua de dos litros
Cafés
Y tabaco
Por
supuesto también el teléfono me recuerda que fuera hay vida extraterrestre.
Algún día
cigarro en mano -para no cambiar mi costumbre-
Me
aventuraré de nuevo
Ya estoy harta de no-disfrutar de prácticas onanistas a
oscuras y de regurgitar la mierda del conejo para facilitarle la digestión.
PD: No sé operar en binario. Pero mejor malo conocido que bueno por
conocer.
1 comentario:
Me ha encantado tu texto... Crudo, vital, arriesgado. Casi un antialícia detrás del espejo. Palabras desgajadas.
Publicar un comentario