30.9.09

ESTACIONES DE PASO
.
Y ahora qué, ahora qué
qué pasará
a dónde han ido las promesas
promesas que hicimos
con el corazón en la mano
en la boca
entre los labios
entre las piernas
Promesas que hicimos
entre gemidos
entre caricias
entre miradas que
valen
más
que
un
te
q
u
i
e
r
o

Supongo que ya no importa
que no hay promesa que valga
que nuestras palabras tuvieron
el valor que
tenemos o tuvimos o tendremos
nosotras
o sea
-Ninguno-

Que los trenes
siguen pasando de largo
dejándonos a nosotras en tierra
(o a mí
por lo menos)
en la misma puta estación
donde nos despedimos
porque creímos que el amor
no sería suficiente para solucionar
la hecatombe de llantos
celos
pataletas
y
gritos

Tú seguiste caminando por la vía a pie
arrastrándote sobre la grava
dejándote en ello las rodillas
y las manos
y la carne entera
Yo preferí mirarte
desde el banco del andén
con un cigarro en la mano
y el alma
corroída
dolida
temblorosa
y
mutilada
a mi lado
o en otra parte
_ya no lo sé
esperando
que volvieses
otorgándote
el valor
que
yo
por
aquel
entonces
creía
que
tenías



Pero no lo tenías.

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