9.10.08

Blanco. Negro. Roto

Como el beso de un niño,
Como mis manos empapadas de ti,
Como un suelo manchado de café,
Café con azúcar y leche condensada.

El mundo cae sobre mí.
Pegajoso. Aplastante. Amenazador.

Un vaso de leche.
El rastro curioso de tus pies sobre las baldosas.
Densidad insoportable.
Lentitud que aburre.

Mundo pegajoso.
Mundo denso.
Mundo empalagoso.

Gestos espesos y forzados.

Tic ... tac

El pegamento de tu odio se ha llevado el ritmo.
Los silencios llegan.
Sólo escucho nanas dulcesque frenan los avances.

Tic ............ Tac

El sonido intermitente de un viejo reloj que ya no da bien la hora.

Negro. Blanco. Roto.

Vayamos por partes:
La lámina de un sueño roto y el olvidado silencio que deshace
en lágrimas una locura vivida.

Mañana no quedará nada de esto,
pero aún así tomémoslo con calma:
Una vez y otra, el cepillo que se desliza por alguna melena rizada.
Una vez y otra, los corazones que laten con fuerza.
Una vez y otra, el chirriar de una vieja mecedora.

Una vez y otra...

Pero... Vayamos por partes:

¿Qué busca un loco?
Dominar el mundo
¿Y yo qué busco?
Que el mundo deje de dominarme a mí.

Mundo pegajoso.
Mundo denso.
Mundo empalagoso.

Tic .................... Tac

Se alejan.

Sólo queda el tedio,

y tal vez la ignorancia.

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